El precio ya no será el factor determinante de las compras públicas en la UE, tras la aprobación esta semana de nuevas directivas en el Parlamento Europeo. Los municipios y organismos de toda la región podrán ahora añadir libremente requisitos medioambientales y sociales a sus pliegos de condiciones en la contratación pública.

Las nuevas directivas dictan que las decisiones de compra se basen en la "oferta económicamente preferible", en lugar del precio más bajo. Los compradores tendrán ahora la oportunidad de solicitar productos que cumplan requisitos adicionales de sostenibilidad, como la responsabilidad medioambiental y social.

"Es una noticia muy positiva", comenta Soren Enholm, CEO de TCO Development. "Ahora el sector público europeo dispone de un nuevo mecanismo para influir en industrias como la de TI en una dirección más sostenible. Esta directiva también permitirá a los compradores especificar abiertamente etiquetas ecológicas de tipo 1 de terceros y certificaciones como TCO Certified en la contratación pública".

Ahorro en muchos frentes
La inclusión de factores de sostenibilidad en la contratación pública puede conducir directamente a muchos resultados positivos, como la mejora de las condiciones laborales en la fabricación, la reducción del impacto ambiental y el ahorro directo de costes. Un estudio alemán de la empresa auditora KPMG concluyó que, sólo en Alemania, el sector público está dejando escapar ahorros estimados en miles de millones de euros por no utilizar suficientemente los requisitos de sostenibilidad en sus prácticas de compra.

El estudio muestra que un tres y medio por ciento de los 480.000 millones de euros que Alemania gasta anualmente en compras podría ahorrarse mediante la aplicación de compras más sostenibles. La fijación en el precio más bajo de bienes y servicios, en lugar de considerar los costes del ciclo de vida, se ha revelado como una causa fundamental del gasto innecesario.