El rápido ritmo de consumo está provocando un aumento de las emisiones en todo el mundo, y el sector informático no es una excepción. Cada año se fabrican unos 250 millones de ordenadores portátiles nuevos, en un proceso de producción que consume mucha energía y depende en gran medida de los combustibles fósiles. Antes incluso de encender un portátil por primera vez, ya ha generado unos 250 kilogramos de gases de efecto invernadero.

En comparación, las emisiones derivadas del uso del ordenador son relativamente pequeñas. La cifra exacta depende de dónde vivas y de cómo se genere la electricidad en tu región, pero a menos que utilices tu portátil durante más de 20 años, la huella total del uso anual nunca se acerca a la huella de la producción.

Por eso es tan importante conservar el portátil durante más tiempo. Menos compras significan menos productos que fabricar para ti, y tu huella media anual se reduce. Duplique la vida útil de su portátil de tres a seis años y reducirá casi a la mitad sus emisiones anuales, de 88,9 kilogramos a 47 kilogramos: cada año se ahorran más de 40 kilogramos. Incluso un año más es importante: si pasas de tres a cuatro años, tu huella anual se reducirá un 23,5%, es decir, 20 kilogramos. Es un paso sencillo y poderoso que puedes dar hoy mismo para reducir tu impacto climático.

Si participa en la compra de ordenadores portátiles y otros productos informáticos para una organización, sus decisiones tienen un impacto aún mayor. Imagine cambiar el intervalo de compra de tres a seis años para un grupo de 10 personas: ¡sólo esta acción podría ayudar a evitar la emisión de 400 kilogramos de gases de efecto invernadero al año! Si consigues aplicar este cambio a 100 personas, simplemente añade un cero. Para 1.000 personas, añade otro cero, y date una palmadita en la espalda por haber evitado la emisión de 40.000 kilogramos de gases de efecto invernadero al año. Es una contribución enorme que proporciona a su organización reducciones cuantificables para incluir en los informes de sostenibilidad. Los efectos son claros y pueden verse en la calculadora de esta página. Para obtener un informe más detallado que pueda exportarse a PDF, consulte nuestro Generador de informes.

El cambio climático no es un problema lejano, está aquí y ahora. A medida que aumenta la temperatura global, emergencias como olas de calor, incendios forestales, inundaciones, tormentas tropicales y huracanes son cada vez más frecuentes, más intensas y más destructivas. Para combatir el cambio climático, debemos tomar medidas rápidas y decisivas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de todas las fuentes principales, incluido el sector de las TI.

Nuestra actual cultura de usar y tirar es innecesaria e insostenible. Cuando un portátil se desecha después de sólo tres años, un asombroso 94% de su huella de carbono total a lo largo de su vida útil procede de las emisiones generadas durante su fabricación. ¡Menudo despilfarro! Si tenemos en cuenta que esto se aplica a millones de dispositivos en todo el mundo, la magnitud del problema se hace evidente. Si no tomamos medidas decisivas, este impacto ambiental no hará sino aumentar.

Cada año se fabrican unos 30 millones de portátiles certificados según TCO Certified . Estos productos cumplen todos los criterios de longevidad de la certificación y se fabrican para una vida útil muy superior a tres años. Si todos estos dispositivos se utilizaran durante seis años en lugar de tres, evitaríamos más de 1,2 millones de toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero al año.

Esto equivale a 2,1 millones de vuelos de ida y vuelta entre Nueva York y Londres. (Un vuelo de ida y vuelta emite aproximadamente 0,6 toneladas de CO₂ por pasajero). Incluso un año más supone una diferencia significativa: se reducen casi 630.000 toneladas de CO₂ al año, lo que equivale a 1 millón de vuelos de ida y vuelta entre Nueva York y Londres.

Al elegir un portátil con la marca TCO Certified, puede estar seguro de que está fabricado para durar. Esto significa menos razones para sustituir su dispositivo y más años de uso productivo.

• Todos los portátiles certificados deben ser duraderos y posibles de actualizar y reparar.
• La batería debe mantener una buena calidad durante muchos ciclos de carga y ser reemplazable.
• La marca informática debe respaldar los productos que fabrica durante al menos cinco años, mediante garantías de producto y actualizaciones de software.
• Una puntuación de reparabilidad verificada de forma independiente indica lo fácil que es mantener, reutilizar y reparar el producto.
• Los productos informáticos deben ser eficientes energéticamente y cumplir las últimas normas Energy Star, o equivalentes.

Los criterios climáticos de TCO Certified también se centran en las emisiones en la fabricación.

• Al menos el 15% de la electricidad utilizada en el montaje final de los productos certificados debe obtenerse o generarse a partir de fuentes renovables.
• Todas las fábricas de paneles de visualización deben implantar un sistema de gestión energética certificado según la norma ISO 50001. Esto ya es un requisito para las fábricas de montaje final.
• La huella de carbono de los productos certificados se anualiza para incentivar el desarrollo de productos con menores emisiones de producción y mayor vida útil.
• Una lista dinámica de mejores prácticas para reducir las emisiones de scope 3 ayudará a los propietarios de fábricas a adoptar medidas de eficacia probada.